Wednesday, July 12, 2006


17. TIENDAS DE MÚSICA

(EMITIDO EN PROTAGONISTAS SEVILLA -PUNTO RADIO, 93.0 FM- EL SÁBADO 1 DE JULIO DE 2006)


Muy buenas tardes, hoy vamos de tiendas. Siempre he sido un consumidor cuasi compulsivo de viejos vinilos y actuales cedés, especialmente de música clásica y jazz. Les invito a recorrer conmigo el triste panorama de las tiendas musicales en nuestra ciudad, y para hablar de ello, necesariamente hay que hacer historia. Calle Sierpes, muy cerquita de la Plaza de San Francisco; tras la Expo, un portentoso edificio de tres plantas se nos aparece como un auténtico paraíso. Triste sueño el de la Virgin, multinacional que no aguantó los envites del emule y las bajas piratas que tanto daño están haciendo a autores musicales. También había un problema de precios: para aquellos que nos gustaba buscar rarezas, aquí las escuchábamos y luego pasábamos a comprarlas a precios siempre más baratos en Sevilla Rock, otra reciente y aún llorada pérdida.
Hoy sólo queda en Sevilla la Sección de música de El Corte Inglés. Estamos en la Plaza del Duque. A los que siempre hemos recordado el lugar con estos almacenes, nos cuesta trabajo pensar que alguien en su sano juicio autorizara la demolición de un palacio para la construcción de esta birria arquitectónica en pleno centro. Llegamos a la acera de los antiguos almacenes Lubre: ordenadas y gigantescas estanterías con cedés, y un relajante y aislado espacio reservado para la música clásica.
Salimos del lugar;callejeando por los alrededores descubrimos otro estilo de compra de música: son las tiendas de segunda mano, cada una especializada en un determinado y juvenil rollo alternativo. En Latimore dominan los antiguos vinilos y cedés de todos los estilos rockeros. Por Amor de Dios llegamos a Records Sevilla, un templo de puretas heavies. Resuena a gran volumen AcDc; hay un gran expositor de camisetas en todas las tonalidades del negro y grabadas con los típico dibujos de estética pseudosiniestra que suelen acompañar a estos grupos cañeros. El centro del local está repleto con miles de cajas de cedés vacías clasificadas por géneros musicales: funk, heavy, hip-hop, y diez mil etiquetas más. Muy poco espacio dedicado al flamenco, y aquí encontramos un cedé de La más grande. Lo mismo he descubierto en todas las demás tiendas: entre toneladas de pop-rock, y camisetas heavies o de diseño, siempre había una o dos joyas de Rocío.
El arte no entiende de géneros: Rocío Jurado no sólo es admirada por los amantes de la copla, sino por cualquier músico. Mónica Naranjo dijo que desde que la Jurado cantó Sobreviviré, ya no quiere volver a hacerlo, y eso que hablamos de otro prodigio de vo desgarrada como el de la rockera. Otro ejemplo: no hay mejor y más cotizada versión de El Amor Brujo de Falla, que la que grabó con su voz La más grande. Y seguimos: impresionante fue escuchar cómo imponía su voz por encima de todo un coro gospel cantando Como yo te amo en su última gala.
Todas las músicas están de luto. Espero que te encuentres bien allá arriba junto a Janis Joplin, la Callas, Edith Piaff, Billie Holiday, o Concha Piquer. Desde aquí, nuestro homenaje. ¡Rocío Jurado, forever!